jueves, 18 de julio de 2013

The Original Blues Brothers Band: Madrid 2013

Cinco años después del anterior encuentro con The Original Blues Brothers Band (también en Madrid, aunque en la sala Joy Eslava), Norberto Camba y un servidor se desplazaron hasta la capital para volver a ver al grupo norteamericano.

"No, no fuimos remando."
 Fue una auténtica suerte que consiguiésemos unos viajes baratos (y cómo la compañía aérea no nos paga, no diremos su nombre) y que, sorprendentemente, un encargo de última hora hizo que pudiese costearme todo este día "de vacaciones". De modo que, poniendo el despertador a las 4:45 de la mañana y saliendo una hora más tarde hasta Santiago, comenzamos la odisea musical pertinente.

Aterrizando en Madrid sobre las 9 de la mañana, hubo tiempo a pasear (las heridas en mis pies lo pueden demostrar), curiosear por la "mejor librería especializada del mundo" según los prestigiosos premios comiqueriles Eisner y observar algunas zonas reconocidas de la ciudad.

Tras inspeccionar el teatro y comprobar lo "amable" que el personal de seguridad puede llegar a ser (de hecho, preguntamos a una de la organización si podríamos darle cariñosamente una colleja al segurata), comenzó el concierto. Sonó así:


"Por no poner "cojonudamente", que suena un poco soez"

El grupo readaptó su repertorio con temas oídos con menos frecuencia en los últimos tiempos, como "Hold On I´m Coming" o "Groove Me", mezclándolos con los ya clásicos "Green Onions", "Peter Gunn" y "Soulfinger" (piezas instrumentales que abren el show); el tributo más cercano al sello Stax con "Knock On Wood" y "Can´t Turn you Loose"; las conocidas por los fans de la película ("She Caught the Katy", "Minnie The Moocher"); el homenaje al blues urbano con "Messin´ with the Kid" o "Sweet Home Chicago" (éste último con la aparición de los miembros de Red House [Jeff Espinoza y Francisco Simón, colegas musicales de Lou Marini] y Ramón Arroyo, de Los Secretos), entre otras tantas que, a judgar por los aplausos, calaron entre el público.

"Rob Paparozzi, entre saltos y bailes, toca la armónica y canta"

  Remataron faena con "Soul Man", donde aprovecharon para homenajear al recientemente fallecido Bobby "Blue" Bland con un fragmento de "Turn on your Lovelight" (tema que la banda ya interpretara en el film Blues Brothers 2000); "Gimme Some Lovin´" (con Cropper intercalando riffs de guitarra y golpes de cencerro) y las habituales "Who´s Making Love" (donde los cantantes Rob y Bobby advertían al público masculino sobre los problemas que pueden surgir al ser infiel) y "Everybody needs Somebody to Love", donde las fuerzas de seguridad del teatro recordaban un poco a la policía de Illinois del film de John Landis, poniendo bastantes problemas para que unos cuantos "hermanos bluseros" del público pudiesen bailar en el escenario con el grupo.


"John Tropea, echándole un ojo al dibujo"

Al finalizar el concierto pudimos charlar con el grupo, enseñarle unos garabatos que hice para el evento y intercambiar opiniones sobre todo: desde los recuerdos de Steve Howard en su paso por el grupo Wings (de Paul McCartney) donde, según él, sí que tenía pelazo, en comparación a ahora (y donde pude "acompañarle en el sentimiento" en esto de la alopecia) a hablar brevemente en Spanish con Lou Marini (el cual estaba encantado por esta actuación, ya que desde sus cuñados hasta su suegra se encontraban entre el público). Subimos al "autoblues" con el grupo (recordaba un poco a excursión de colegio) y acabamos cenando en un kebab con Rob y Bobby, donde hablamos de proyectos, trabajos, discos, grupos y estilos musicales (Norberto habló de medicamentos, dado que los cantantes son propensos a alguna que otra pequeña lesión entre saltos y bailes, pero yo ahí ya no me meto).


"Bobby, todo un soulman, tras gastarse los dineros en invitar a los cafres de la foto"


Después de todo eso, tocó acercarse al aeropuerto y pasar el resto de la noche esperando a uno de los primeros vuelos de la mañana, para volver a la Galicia natal.


"Tanto Rob como Bobby arriesgaron su vida en medio de la carretera para sacar estas fotos"


Agradecer eternamente a Bobby (un placer conocerle) y a Rob por el trato, y también al resto del grupo (más de uno se acordaba de haberme visto en alguna otra ocasión) y a su manager, por charlar largo y tendido sobre la banda y su vida. A todos ellos, y para que al menos puedan enterarse de algo, "Thank you very much".

PD: Siempre había bromeado con que mi apellido se pronunciaría "Biusira" en inglés. Pues se pronuncia exactamente así.

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