La revista El Arca de las historietas echa el cierre. El proyecto creado por David Braña desaparece, tras ocho números publicados, e infinidad de historias ficticias contadas a través de sus páginas y otras historias, esta vez reales, sucedidas en eventos.
"Portada del último número"
De los entresijos de la publicación podría hablar largo y tendido, y seguramente no sorprenda a nadie la situación en la que se encuentra el universo de las viñetas en este país. Que la revista haya durado lo que ha durado ha sido posible gracias al impulsor de la idea, ya que muchas "ayudas externas" acaban complicando más que solucionando problemas que podrían existir con anterioridad. También recordar algo obvio: los proyectos independientes necesitan apoyo. La semana pasada se hablaba de Mixtape, y de como la bajada de ventas ha impedido que la publicación siga funcionando. A DC o a Marvel poco les importa que tú no le compres la enésima aventura de Superman o Capitán América cada mes; al que no forma parte de una multinacional, una compra menos puede significar mucho. Las publicaciones independientes dependen de (¡oh, sorpresa!) ventas para poder correr gastos y poder así volver a sacar un número nuevo más adelante. Y recordemos que, en infinidad de casos, el producto llega a ti porque existe alguien lo suficientemente loco para poner dinero de su bolsillo, apostar por la publicación, organizarla y, en más de un caso, ser ese autor loco el que tenga que pasarse por la librería a la que te pasas asiduamente para conseguir que su proyecto esté en las estanterías.
El Arca de las historietas ha contado con la participación de gente como Juan Alarcón, Roberto Corroto, Jose A. Ares, Abel García, Pedro Belushi, Gabriel Iglesias, Adolfo Rodríguez, Álex Cal, Jordi Bayarri, Víctor Santos, Francesc Martínez, Van Durán o Abel Cicero, al igual que esa dinamo de atracción sexual conocida como David Buceta. Aunque el proyecto no producirá más números, todavía podéis conseguir algunos de los números anteriores, entrando en su página web.
¿Presenciamos la extinción de las publicaciones independientes? La respuesta no estará a la misma bat-hora, el mismo bat-día en el mismo bat-canal, me temo.
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